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¿Has oído hablar de The Turkey Problem?
Puede afectar la forma en que piensas sobre los resultados que obtienes cuando alimentas a tu perro. Pero antes de explicarte qué es, queremos hacer mención de cómo muchos dueños de mascotas presumen la calidad superior de su propia comida casera para perros. Y francamente, no lo dudamos ni un poco. Finalmente, la mayoría de las dietas caseras se hacen con amor…
Utilizan ingredientes reales de grado humano. Algo que rara vez ocurre con la mayoría de los alimentos para perros "normales". Pero la calidad de los ingredientes no es lo único que importa. ¿Qué pasa con el equilibrio nutricional? ¿Y el efecto a largo plazo de alimentar a tu mascota con alimentos caseros?
La verdad es que casi todas las dietas caseras tienen algún tipo de debilidad grave en el diseño. En muchos casos, la receta carece de una fuente de calcio. Lo cual nos hace preguntarnos, ¿De qué otros nutrientes carece?
En un famoso estudio de 2013 realizado por la escuela de veterinaria de UC Davis y publicado en el Journal of the American Veterinary Medical Association; solo 9 de las 200 recetas caseras que se probaron cumplieron con los estándares mínimos de nutrientes para perros establecidos por la Association of American Feed Control Officials. Todos los demás estaban nutricionalmente incompletos o desequilibrados.
Sin embargo, la mayoría de las personas que alimentan con dietas caseras a sus perros les gusta señalar que están saludables. Ahora bien aquí entra a lo que el famoso autor Nassim Taleb llama... The Turkey Problem.
Se refiere al hecho de que los dueños de perros a menudo confunden la ausencia de daño visible como prueba de que no habrá daño. El pavo cree que debido a que no hay señales visibles de que el granjero le esté haciendo daño, su futuro está asegurado. Y luego viene el Día de Acción de Gracias.
El daño nutricional no siempre es fácil de ver. El hecho de que no se vea una deficiencia nutricional en un perro no significa que no esté allí. Demasiado de un nutriente o muy poco de otro puede tener efectos devastadores que pueden no aparecer durante años. Hasta que es demasiado tarde y no hay nada que puedas hacer al respecto.
Una alternativa más segura, si aún deseas alimentar con una dieta casera a tu mascota, es consultar a un nutricionista veterinario certificado. Un veterinario puede ofrecerte una dieta segura y completamente balanceada que puedes preparar de forma casera.
Otra alternativa, es la nueva categoría de alimentos frescos para perros, pues ofrecen una dieta completamente balanceada que sea lo más casera posible. Sin todo el riesgo nutricional y el trabajo duro. Estos nuevos alimentos frescos para perros son comidas súper saludables diseñadas por veterinarios y con controles de calidad. Hechos a la medida para la edad, peso, raza, nivel de actividad y alergias.
En Tails.Co contamos con personal capacitado que puede orientarte de acuerdo con tus necesidades y las de tu mascota. Recuerda siempre consultar a tu médico veterinario de confianza antes de cambiar la dieta de tu perrito.
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