México se destaca tanto por tener la mayor cantidad de veganos de Latinoamérica como por contar con una significativa comunidad de vegetarianos. Los porcentajes de vegetarianos (8%), flexitarianos (10%) y veganos (4%) están por encima del promedio regional. Se espera que esta cifra aumente aún más si se tiene en cuenta el crecimiento proyectado de la industria de sustitutos de la carne.
Y eso es sólo la población humana. ¿Qué pasa con los 43.8 millones de perros que viven en México? ¿Pueden ser parte de este boom de las dietas vegetarianas y veganas, o su gusto por la carne es un poco más difícil de superar? ¿Está bien la comida vegana o vegetariana para perros?
La gran mayoría de los alimentos para perros en el mercado hoy en día contienen carne o pescado de alguna variedad, típicamente mezclados con carbohidratos y vegetales. Esta fórmula ha demostrado ser una forma confiable y rentable de garantizar que las mascotas reciban los nutrientes y las vitaminas recomendados necesarios para llevar una vida saludable.
Sin embargo, existe un consenso científico cada vez mayor de que los perros pueden obtener todas las proteínas y aminoácidos que necesitan de una dieta basada en plantas y quizás incluso ser más saludables que sus contrapartes que comen carne en algunas circunstancias.
Parte de esto se debe a la forma en que los perros han evolucionado. Sí, sus ancestros lobos llevaron y continúan llevando un estilo de vida en gran parte carnívoro, pero en las decenas de miles de años desde su domesticación, los perros se han desarrollado para tolerar una dieta omnívora similar a la de sus padres humanos, lo que significa que pueden vivir con una dieta que contenga tanto la carne como las plantas.
Esta es una de las formas en que los gatos y los perros son verdaderos opuestos. Los gatos son lo que se llama carnívoros obligados, lo que significa que necesitan carne o pescado, y especialmente el aminoácido taurina, para sobrevivir. Los perros no dependen tanto de la carne para obtener taurina como pueden obtenerla de otras fuentes, aunque aún necesitan niveles saludables en su cuerpo.
Los perros requieren ciertos nutrientes en su dieta, en lugar de ingredientes particulares. Una dieta vegetariana o vegana, cuando está bien formulada, puede ser una excelente opción, especialmente para perros con alergias. No sorprende saber que el mercado de alimentos para perros vegetarianos y veganos ha crecido rápidamente en los últimos años, con muchas marcas que introducen recetas sin carne en el mercado y reciben la certificación de la Asociación Estadounidense de Funcionarios de Control de Alimentos (AAFCO por sus siglas en inglés) en el proceso.
¿Pueden los perros estar sanos con comida para perros vegetariana o vegana?
Ahora, antes de tirar la comida para perros llena de carne a la basura, hay un par de cosas que debes considerar antes de poner a tu mascota en una dieta sin carne. En primer lugar, ¿es adecuado para las necesidades dietéticas específicas de tu mascota? La única persona que podrá ofrecerte la mejor orientación es tu veterinario, ya que tendrá una gran idea del peso y el historial de enfermedades de tu perro.
Otra cosa a tener en cuenta es la deficiencia de sustancias clave. Como sucede a veces con los humanos que siguen una dieta vegana, los niveles de vitamina B12 pueden disminuir en los perros que no consumen carne ni lácteos. Esta vitamina es naturalmente abundante en productos animales y es crucial para la formación de glóbulos rojos, así como para el funcionamiento saludable del sistema nervioso y el cerebro.
Muchas recetas vegetarianas incluirán B12 de ingredientes lácteos, pero debes comprobar si los alimentos para perros sin carne tienen cantidades suficientes de B12. Si no la tienen, debes buscar suplementos vitamínicos separados para mantener niveles saludables y evitar efectos secundarios desagradables, que incluyen pérdida de energía o apetito y un pelaje sin brillo.
Es una historia similar cuando se trata de la taurina, un aminoácido que se encuentra en la carne y que contribuye a la función saludable de los sistemas nervioso, digestivo e inmunológico. Si bien los perros generalmente son capaces de producir las moléculas necesarias a partir de otras fuentes, la carne y el pescado son las fuentes más fáciles.
Una forma de aumentar los niveles de taurina es agregar un suplemento a la dieta de tu perro, ya sea una pastilla o un polvo. La buena noticia es que no hay peligro de que le des demasiado a tu perro, simplemente procesarán el exceso y lo desecharán en caso de que suceda.
¿Existen otras dietas alternativas?
Algunos dueños optan por evitar la carne por razones relacionadas con la salud o el bienestar animal, pero otros están motivados por el impacto perjudicial que tiene la industria cárnica en el planeta. Si te impulsan las preocupaciones ambientales, hay otro desarrollo reciente que merece tu atención.
¿Cómo te hace sentir la idea de alimentar a tu perro con insectos? En los últimos años, ha habido una proliferación de nuevas marcas de alimentos para perros que ofrecen productos elaborados con insectos, como gusanos de la harina o larvas de mosca. No solo es una excelente fuente de proteínas e hipoalergénica en muchos casos, sino que requiere mucho menos tierra y carbono para fabricarse.
Entonces, ¿deberías hacer el cambio?
Esta es una pregunta difícil, y totalmente personal. Si bien la comida para mascotas sin carne es un tema candente en la comunidad científica, hay poca investigación que rastree los efectos a largo plazo de un perro que sigue una dieta vegetariana o vegana. Es comprensible que algunos dueños prefieran apegarse a lo que ya funciona hasta llegar a una conclusión firme.
Sin embargo, la mayoría de los estudios recientes parecen concluir que tu perro no sufrirá resultados adversos para la salud con una dieta vegetariana y vegana, siempre que su comida esté enriquecida con nutrientes vitales como la vitamina B12 y la taurina. Incluso grandes organizaciones, como el American Kennel Club, han expresado su aprobación de las dietas para perros sin carne.
Tu perro también debe tener voz en la decisión. Si cambias a una dieta vegetariana o vegana y notas un cambio negativo en su comportamiento o personalidad, debes volver a la carne. Del mismo modo, tu perro también puede mostrar una aversión a las recetas vegetarianas por cualquier motivo y no debes obligarlo a devorarlas solo para calmar tu conciencia: son ellos los que realmente comen la comida al final del día.
Si decides hacer el cambio, ten en cuenta que cualquier transición entre diferentes tipos de alimentos, incluso si se trata de dos recetas a base de carne, debe hacerse gradualmente. Comienza mezclando una pequeña porción de la nueva marca en la mezcla anterior y aumenta gradualmente el tamaño en el transcurso de una semana más o menos. De esta manera, el interior de tu perro se acostumbrará a la nueva comida y reducirás el riesgo de malestar estomacal sensible.
Comentarios