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Mantener a tu mascota sana no sólo implica darle una buena alimentación y acudir al veterinario de vez en cuando. Existen una serie de parásitos externos e internos, diminutos en muchos de los casos, que pueden infestar a tu mascota y que si no se tratan a tiempo pueden acabar afectando gravemente su salud.
Los parásitos externos más comunes son las garrapatas (que pueden causar anemia, dolores articulares e incluso síntomas neurológicos como convulsiones, parálisis), pulgas (pueden transmitir, entre otras, un parásito sanguíneo llamado Hemobartonella) y ácaros (producen otitis y sarna). Los parásitos internos más comunes son los gusanos intestinales (son redondos y planos, pueden dar problemas a nivel pulmonar) y los gusanos del corazón (estos son transmitidos por los mosquitos).
La desparasitación es algo muy importante y complementario que debes tener en cuenta. Es una tarea fundamental para la salud de tu mascota, ya sea perro o gato. De hecho, un error común entre muchos dueños de gatos es pensar que, al no salir de casa, los felinos no tienen por qué someterse a esto.
Es importante considerar la edad del perro o gato, y si tiene algún problema de salud, por lo que se recomienda consultar al veterinario. No obstante, es aconsejable desparasitar a tu mascota cada tres meses, aproximadamente. Independientemente de ello, si notas lombrices o puntos blancos en sus heces, o bien se producen episodios de diarrea y cambios de ánimo, o si tu mascota se rasca más de lo habitual, deberás ponerte en contacto con tu especialista.
¿Porqué desparasitar a tu mascota? Para prevenir enfermedades, trasmitidas en ocasiones por garrapatas, pulgas y otros insectos, considerados parásitos. Existen muchos productos en el mercado como collares, pastillas y pipetas, que son de fácil aplicación. Te recomendamos consultar con tu veterinario la mejor opción para tu mascota.
Así mismo, es importante consultar el periodo de validez del tratamiento que utilices ya que, una vez transcurrido el tiempo, ya no tendrá efecto por lo que tendrás que desparasitar periódicamente a tu mascota. Y aunque no tenga parásitos, esta práctica tienen una función preventiva. Recuerda siempre consultar a tu veterinario de confianza antes de aplicar cualquier tipo de tratamiento en tu mascota.
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