El Husky siberiano

Esta raza es tan antigua que fue creada hace tres mil años. La tribu Chukchi del noreste de Asia la desarrolló con la finalidad de acoplarse a la vida nómada que tenían. Se tomaron en cuenta la fuerza para tirar de un trineo, la capacidad de convivencia entre sí para trabajar en equipo, y la docilidad con los humanos.

Posteriormente, con el surgimiento de la Fiebre de Oro en Alaska y al ver que otros animales como los caballos y asnos no soportaban el frío, la lógica llevó al humano a elegir al Husky siberiano como su principal herramienta de trabajo. Y a partir de ese momento se comenzó a reproducir la raza como hoy en día la conocemos.

Es importante conocer la historia de una raza pues desde su origen podemos saber cómo y para qué fueron diseñados. Los huskies son perros con mucha energía, muy juguetones pero también son inteligentes. Por ello se recomienda que reciban adiestramiento desde cachorros.

Son perros diseñados para correr y aguantar temperaturas muy bajas; por eso cuando hace calor tienden a cavar en la tierra, pues buscan lo fresco. Ya que fue una raza desarrollada en condiciones muy duras y extremas, es común que si no se ejercitan constantemente y son sobrealimentados, pueden padecer sobrepeso fácilmente.

Si tienes un Husky o planeas tener uno, toma en cuenta que el entrenamiento positivo y a temprana edad te ayudarán considerablemente para que tu perro se centre en las personas, pues disfrutan mucho de la compañía humana. Igualmente, si lo dejas solo por un tiempo prolongado ten por seguro que encontrarás algo mordido. Por eso es tan importante mantenerlos activos y ejercitados.

Ahora que ya sabes un poco más sobre esta raza ¿tendrías uno?