Es difícil pasar por alto el aumento de la popularidad y la disponibilidad de aceites, gomitas, golosinas, etc. de CBD para perros, tras un auge similar de los productos de CBD para humanos. Sus supuestos beneficios son muchos, entre ellos la salud de las articulaciones y la relajación.
La gente, desde los dueños de perros hasta los científicos y los veterinarios, lo recomiendan. Sin embargo, la investigación sobre sus efectos en los perros está en sus inicios y la regulación es un poco al estilo "salvaje oeste" (aunque la ciencia se comprende bien). Y con eso viene la confusión, las dudas y las preguntas.
Es comprensible que muchos dueños de perros sean cautelosos a la hora de darles CBD a sus perros. Pero, ¿Cuál es la verdad, cuál es el mito y qué está por saberse aún?
Actualmente, la FDA no revisa los productos de CBD. Planean trabajar en un marco para hacerlo, pero no es algo que se quiera abordar a la ligera. Por lo tanto, la reconocida veterinaria, profesora y decana emérita de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de la Universidad Texas A&M, la Dra. Eleanor Green decidió hablar de ello.
En resumen, explica lo siguiente:
Es fácil confundir la terminología. Los cannabinoides son todos los componentes químicos naturales y biológicamente activos de las flores, hojas y tallos de las plantas de cannabis. Los cannabinoides que se encuentran en las plantas, llamados fitocannabinoides, imitan a los neurotransmisores endógenos para ejercer sus efectos en el ECS.
Aunque el CBD, o cannabidiol, es el más conocido, es solo uno de los más de 120 cannabinoides identificados actualmente (otros incluyen CBG, CBDV, CBN, CBC, THC…), cada uno con propiedades y efectos únicos dentro del ECS. Esto abre un mundo de aplicaciones específicas de diferentes cannabinoides para uso animal y humano.
Otro punto de confusión habitual es la diferencia entre el CBD y la marihuana. Cuando la población en general oye “cannabis”, la mayoría piensa inmediatamente en la marihuana. La marihuana contiene altos niveles (>0,3%) de THC (tetrahidrocannabinol), la sustancia a la que se atribuyen los efectos psicotrópicos, el “subidón”.
Otra fuente de malentendidos sobre los cannabinoides son los informes sobre intoxicación por marihuana en animales. El aumento del consumo de marihuana en personas ha provocado una mayor exposición de los animales, lo que puede provocar intoxicación, ya sea por ingestión o inhalación.
El acceso a productos para humanos que contienen marihuana puede provocar un consumo excesivo de THC, lo que puede provocar enfermedades de distinta gravedad e incluso la muerte. Los perros consumen con gusto todos los brownies que contienen marihuana que puedan. Es importante señalar que los productos de CBD de alta calidad sin THC no provocarán este tipo de toxicosis.
El cannabis medicinal regulado adecuadamente es posible y seguro para los perros. La Sociedad Veterinaria de Cannabis es un gran recurso para encontrar información. Los productos de cáñamo, específicamente las moléculas no psicotrópicas como el CBD, el CBG y otras, han demostrado niveles increíbles de seguridad en animales (y en humanos, por supuesto; bromeamos diciendo que los cannabinoides se probaron exhaustivamente en humanos antes de su uso en animales).
Los suplementos de salud con cannabinoides para mascotas pueden favorecer la salud de las caderas y las articulaciones, la salud digestiva, la salud inmunológica, la salud de las personas mayores/geriátricas, la salud del cerebro y mucho más. En beneficio de la salud y el bienestar de la mascota, todo lo que se le dé a un animal debe estar bajo la supervisión de un veterinario. El veterinario conoce el estado de salud completo del animal, por lo que debe estar al tanto de todo lo que sucede.
Si tenias ideas preconcebidas o la mente completamente abierta respecto al uso del CBD en tu mascota, esperamos que esta información te haya funcionado para aclarar tus dudas. Para recibir información importante respecto a la salud de tu mascota, te recomendamos suscribirte a nuestro blog. ¡Hasta la próxima!
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